La ciudad se prepara poco a poco para la reapertura económica en su nueva etapa de transición hacia la nueva normalidad, en la que se espera continúe el buen comportamiento ciudadano, para que las cifras de contagiados y recuperados sean cada día más esperanzadoras, y la letalidad baje a lo mínimo.
María Claudia Peñas, asesora para la reactivación económica del Distrito, explicó que la Alcaldía se encuentra revisando cuáles serán los nuevos sectores y actividades económicas y sociales que empezarían a abrir a partir del primero de septiembre.
En esos sectores se encuentra el comercio al por menor y bienes de servicio no esencial, hoteles ubicados en el área urbana de la ciudad, moteles, canchas de golf y de tenis, deportes de aguas profundas, entre otros.
“Progresivamente, y de manera escalonada, vamos abriendo nuevos sectores en la medida que las condiciones epidemiológicas lo permitan”, afirmó la funcionaria.
El Distrito viene estructurando varios planes pilotos, como el de restaurantes con atención en mesa, para lo cual más de 250 de estos establecimientos de comercio se inscribieron ante la Alcaldía, de los cuales cerca de 220 cumplieron con el primer filtro, y en este momento se revisan documentos para pasar a un tercer filtro y verificar el espacio físico donde prestarán el servicio.
Estos restaurantes y cafeterías solo podrán operar en espacios abiertos como terrazas, plazas antejardines y deben cumplir varias solicitudes del DADIS, como el ingreso solo con reserva, máximo cuatro personas por mesa. Además, deben cumplir con todos los protocolos de bioseguridad.
El Distrito ha sido enfático en que toda esta reapertura se dará teniendo en cuenta las condiciones epidemiológicas que se presenten en el transcurso de esta semana.